Desconozco cuándo tomé la decisión de arrancar este proyecto. Lo único que tengo claro ahora mismo es que necesito sacarlo adelante para sentir que valgo para algo más que comer, dormir y respirar. Y por el momento es más que suficiente.
Practicar la confianza en mis capacidades es la principal misión de esta newsletter que aquí presento. No es sencillo, pues estoy acostumbrada a ser transparente y no es mi intención sacar de paseo mis miserias por estas líneas. Pero tampoco quiero parecer perfecta e inmaculada, por lo que compartiré por aquí experimentos sean cuales sean sus resultados porque de todo se aprende, y de los errores más.
El estoicismo me ha puesto de nuevo en el mapa
Cada día y cada noche no dejes de reflexionar sobre este tipo de pensamientos. Escríbelos, léelos en voz alta, habla sobre ellos con los demás y contigo mismo.
Epicteto.
La vida sin un propósito no merece la pena ser vivida. Así he estado durante un largo tiempo, sumida en unas tinieblas que no me dejaban ver lo hermoso que es el mundo y las criaturas que lo pueblan.
Un día me acordé de un libro sobre filosofía1 que había leído hacía mucho. En él dedicaban una parte a las enseñanzas de los estoicos, y eso había resonado conmigo.
Ya te estarás imaginando cómo sigue esta historia y aciertas de pleno: repasé la parte dedicada al estoicismo y busqué en Google más información. Lo que fui encontrando me siguió resonando y hasta hoy.
Ahora tengo un propósito, es pequeñito y nada pretencioso. Solo quiero realizar lo que propuso Epicteto hace casi dos mil años; pensar en abierto, escribir mis reflexiones y después compartir en esta newsletter lo que vaya aprendiendo.
Quizás con el tiempo haya cambios. Este cuaderno tiene el índice en blanco para rellenarlo paso a paso.
Hasta la siguiente página.
Créditos imagen de portada: Karl Raymund Catabas
El arte de pensar, de José Carlos Ruiz.
Genial. Aguardo tus próximas letras!!
Hola, Paloma. Feliz de leerte de nuevo, de verte con fuerza para asomarte por aquí. Te mando un abrazo grande 💪