El pasado domingo una de las newsletters que leo puso negro sobre blanco una idea que llevaba unas semanas rondando por mi cabeza. Ya sabes, empieza como un run-run que aumenta en intensidad y sin que te des cuenta tienes un altavoz en cada oreja que no igualan ni los de tu discoteca preferida.
Ya son varias las ocasiones en las que, para cumplir un plazo que me he autoimpuesto yo solita, llego a la redacción de estas páginas con la lengua fuera. Esto me genera un estrés innecesario y me recuerda épocas que prefiero olvidar, así que hoy me presento aquí para decirte a ti y a mí misma que no volveré a escribir con esa obligación.
Desde ahora escribiré siempre que tenga algo que me apetezca compartir, además de tiempo y ganas de hacerlo. Esto puede significar que una semana te envíe dos páginas y pasen un par de meses hasta la siguiente.
Hay otra razón de peso: he comenzado un blog en Hive. ¿Qué es eso? Todavía no lo tengo demasiado claro, para qué te voy a engañar. Dejémoslo en que es una especie de Facebook donde puedes monetizar el contenido que subes. Si los ojos se te han dado la vuelta y ahora reflejan el símbolo del dólar, espera un momento.
Es cierto que se puede ganar dinero, pero no vale subir cualquier cosa y de cualquier manera. Estás en las manos de los lectores pues ellos son quienes votan tu contenido y quienes deciden la recompensa que obtienes a cambio. Si piensas que te harás rico colgando las fotos de tus pies en la playa siento decepcionarte.
Al principio de llegar a Hive utilizaba el material que ya tenía escrito aquí, así experimentaba sin dedicarle excesivo esfuerzo. Más tarde pasé a escribir sobre otros temas e incluso me he atrevido con algún relato de ficción. He tenido varios posts muy bien valorados, lo que me ha llenado de alegría porque supone un empujón importante a mi autoestima como escritora.
Estoy muy contenta de haber empezado con estas páginas hace ya tres meses, y de haber cumplido con mi compromiso semanal hasta ahora. Las lecturas y visitas de este espacio son muchas más de las que esperaba al comenzar. El porcentaje de vosotros que os molestáis en abrir estas misivas es más del doble que la media (según los datos de esta plataforma), y casi ninguno de los que os subís en el carro os bajáis, ni en marcha ni al parar en los semáforos. Aprovecho para daros las GRACIAS a todos y cada uno, a muchos os pongo cara pero a otros tantos no, y lo valoro de igual forma o mejor si cabe.
Voy a continuar con este cuaderno. Solo cambia la velocidad de consumo del papel. Te sigo esperando en la próxima página.
PD.- Si tienes curiosidad, aquí te dejo el enlace de mi perfil en Hive:
Cita para pensar
Cuida tus pensamientos, porque se convertirán en tus palabras. Cuida tus palabras, porque se convertirán en tus actos. Cuida tus actos, porque se convertirán en tus hábitos. Cuida tus hábitos, porque se convertirán en tu destino.
Gandhi.